El mármol aporta una sensación de lujo clásico y sofisticación que es difícil de igualar con otros materiales.
Durabilidad y Longevidad:
Su resistencia a los impactos y la compresión lo hace ideal para áreas con tráfico pesado, garantizando una larga vida útil.
Fácil Mantenimiento:
Los derrames pueden limpiarse fácilmente si se actúa con rapidez, evitando que se absorban y causen manchas permanentes.
Versatilidad:
Puede ser combinado con otros materiales naturales, como la madera y el metal, para crear espacios únicos y contemporáneos.
Sensibilidad al Ácido y Productos Químicos:
Las áreas de alto uso, como cocinas y baños, deben ser selladas regularmente para proteger el mármol contra la exposición a sustancias potencialmente dañinas.
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